La papaya o frutabomba es el fruto del árbol de la papaya, cuyo nombre científico es Carica Papaya. Es originaria de Centroamérica y el norte de Sudamérica, más concretamente de México. Este árbol fue distribuido por los conquistadores en las regiones tropicales y subtropicales.
En la actualidad, se cultiva en América Central (desde México hasta Brasil), pero también en las Antillas y en Asia tropical.
Hoy en día, la papaya es una de las plantas más cultivadas del mundo. Su fruto, semillas y hojas se utilizan comúnmente en diversas formas de cocina y medicina popular. Aunque la investigación en humanos es limitada, los productos derivados de ella se han utilizado ampliamente para tratar enfermedades y promover la salud durante muchos años.
La frutabomba es más que una rica fruta, sus hojas concentran enzimas, vitaminas y minerales esenciales, por eso en la sección de hoy comentaré sobre algunas de sus propiedades.
Las hojas de papaya se usan comúnmente en extracto, té o jugo, y se ha demostrado que tratan los síntomas asociados con el dengue. Otros usos comunes incluyen: reducir la inflamación, mejorar el control del azúcar en la sangre, favorecer la salud de la piel y el cabello y prevenir el cáncer.
Sus hojas contienen componentes vegetales únicos que han demostrado un potencial farmacológico significativo en estudios in vivo e in vitro. Aunque existe poca investigación en humanos, diversos productos elaborados con hojas de papaya como tés, extractos, comprimidos y jugos, se utilizan ampliamente para tratar enfermedades y promover la salud de diversas maneras.
Actualmente, no hay suficiente evidencia para recomendar con precisión la dosis de las hojas para cada uso. Sin embargo, tomar tres dosis diarias de hasta 30 mililitro de extracto de hoja se considera seguro y eficaz para tratar el dengue, por ejemplo.
Si bien se necesita más investigación para demostrar los beneficios de las hojas de papaya, en realidad, su consumo es relativamente seguro. Un estudio realizado en animales en 2014 reveló que las hojas de papaya no tenían efectos tóxicos, incluso en dosis muy altas, y los estudios en humanos han reportado muy pocos efectos secundarios negativos.
Sin embargo, las personas alérgicas a las hojas de papaya no deben consumirlas en ninguna forma. Además, si está embarazada o en período de lactancia, consulte a su médico antes de usar cualquier preparado con hojas de papaya.
LA RECETA DE HOY:
Té de hoja de papaya
Ingredientes:
5 cucharadas de hojas secas de papaya
1 litro de agua
1 cucharada de miel
Preparación:
En una olla pon a hervir el agua. Cuando comience a burbujear agrega las hojas secas y deja por 10 minutos. Pasado ese tiempo se retira del fuego y deja enfriar por otros 10 minutos.
Antes de servir, cuela y endulza con un poco de miel o azúcar, como prefieras.