El gobierno cubano ha aprobado el Decreto Ley “Sobre el uso de la energía nuclear y las radiaciones ionizantes”, un instrumento legal que actualiza y consolida las normas para garantizar la seguridad radiológica en el país.
La normativa, dividida en 14 capítulos, establece pautas para proteger a la población, el entorno y los bienes materiales, al mismo tiempo que fomenta aplicaciones beneficiosas de esta tecnología.
La legislación sigue las recomendaciones del OIEA y prohíbe terminantemente actividades vinculadas al desarrollo de armas nucleares, limitando su empleo a fines exclusivamente pacíficos.
Además, regula las operaciones de personas y entidades –nacionales o extranjeras– que manejen materiales radiactivos en la mayor de las Antillas.
Según Rosbell Bosh Robaina, director de Seguridad Nuclear, el decreto incluye protocolos detallados para la gestión de residuos peligrosos y fuentes en desuso. Por su parte, Gladys López Bejerano, presidenta de la Agencia de Energía Nuclear, destacó que la norma responde al creciente uso de estas tecnologías en sectores como salud, agricultura y estudios ambientales, así como a la evolución de los estándares globales.
El marco legal se articula con otras regulaciones recientes, como la Ley 150 (Recursos Naturales) y el Decreto Ley 10 (Autoridades Reguladoras). Entre sus principios clave figura el enfoque preventivo, que exige justificación técnica para cada aplicación y evalúa alternativas menos riesgosas. También crea un sistema de inspecciones y multas para asegurar su cumplimiento.
Esta iniciativa refuerza el compromiso de Cuba con la no proliferación nuclear y la protección ambiental, en sintonía con tratados internacionales. El CITMA será el encargado de supervisar su implementación, marcando un hito en la modernización del marco jurídico nacional para un desarrollo tecnológico seguro y responsable.
