Pinar del Río registró 141 incendios forestales al cierre del periodo poco lluvioso, el que constituye el de mayor ocurrencia de esos siniestros en los últimos cinco años en la provincia más occidental.
La etapa que concluyó el 31 de mayo, en correspondencia con el inicio de las precipitaciones, reportó afectaciones a tres mil 072 hectáreas, explicó a la Agencia Cubana de Noticias el teniente coronel Alexander Pereda Burón, jefe del Cuerpo de Guardabosques de Cuba (CGB) en el territorio.
En la ocurrencia de incendios incidió la intensa sequía y alrededor del 88 por ciento estuvieron vinculados a negligencias de la población, precisó.
Presencia de cazadores furtivos, la quema para diferentes fines y la circulación de vehículos sin matachispas figuran entre las principales causas.
Pereda Burón apuntó que el resto de los sucesos tuvieron un origen natural, fundamentalmente asociado a descargas eléctricas.
Además, la existencia de material combustible dentro de las áreas boscosas, luego del paso del huracán Ian, permitió el auge de las llamas en no pocos casos.
Puntualizó que los daños económicos sobrepasan los 60 millones de pesos y los municipios de mayor incidencia fueron Pinar del Río, Sandino, Mantua y Guane.
Dos siniestros de grandes proporciones se originaron en el periodo, uno en el municipio de Mantua, con mil 472 ha dañadas; y el otro, en Los Palacios, con más de 200.
Vueltabajo se comporta por encima de la media nacional en cuanto a la respuesta rápida y efectividad ante la ocurrencia de incendios que no sobrepasan las cinco hectáreas, dijo.
