«Rechazamos las nuevas medidas, políticamente motivadas, impuestas por el régimen de Trump contra Cuba. Cada medida coercitiva de su Gobierno está especialmente dirigida a estrangular la economía cubana y alejar las perspectivas de relación respetuosa entre nuestros países», escribió el canciller y miembro del Buró Político del Partido, Bruno Rodríguez Parrilla, al condenar otra sanción de EE. UU. contra la Isla, luego de incluirla en la espuria lista de Estados patrocinadores del terrorismo.
La Oficina de Industria y Seguridad del Departamento de Comercio de EE. UU. impuso nuevos controles sobre cualquier tecnología estadounidense y actividades específicas de personas de ese país que puedan estar apoyando actividades de «inteligencia militar» en China, Cuba, Rusia, Irán y Venezuela, alegando que «son naciones que apoyan el terrorismo», señaló el secretario de Comercio, Wilbur Ross.
Esta nueva medida, a menos de una semana de la salida de Trump de la Casa Blanca, pretende negar toda posibilidad de adquirir equipos, productos, y componentes de alguna novedad tecnológica, y penalizar a persona o compañía dispuesta a brindarla.